Todos nos volvemos locos alguna vez.

martes, 20 de diciembre de 2011

La Noche.

Y no me importó el final.
Fué como arrancar una flor. La única flor.
La flor mas bella de todas.
El papel de aquella carta ardía con magia.
Lo disfruté.
Empecé a vagar, vascilé.
Quien diria si no era yo, que me olvidaría.
Que jamas te habría recordado.
Un estado mental.
Un capricho.

Como si no pudieses vivir sola,
Mentias y conquistabas.
Favores que te agradecí,
no sabes cuanto.

Creamos el constraste solo para hacernoslo notar.

1 comentario: